Tic…Tac…Tic…Tac… El tiempo va pasando, segundo a segundo giran las manecillas del reloj y aumenta mi desesperación… estoy aquí sólo sentado entre sillas blanca e incomodas… entre cuatro paredes voy escuchando diferentes nombres de personas… el altavoz infeliz las va llamando… se las va llevando… Tic…Tac…Tic…Tac…
De la puerta azul sale una abuela con sonrisa decaída seguida de su supuesto nieto con una sonrisa de oreja a oreja… estará triste por qué no le quedan más dulces de regaliz que darle a su nieto… estará contento por qué se acaba de comer una regaliz… nadie sabe los motivos, nadie explica nada… sólo veo efímeras imágenes y supuestas interpretaciones salir de la puerta azul…
Tic…Tac…Tic…Tac… una mujer de vientre inflado y un hombre preocupado acaban de infiltrarse en las sillas blancas e incomodas… no paran de gritarse… me duele la cabeza de tanto esperar… parece ser que al hombre se le olvidó alguna cosa… será eso lo que provoca el hinchazón del vientre de la mujer… no creo… ahora es el hombre que grita disgustado… no para de decir nombres… serán curanderos… quien sabe… sólo oigo historias en la cabeza, sólo palabras que se lleva el tiempo hacia diversas esquinas del mundo y del pasado… Tic…Tac…Tic…Tac…
… perdón…se referirán a mi… tengo de girarme para ver el lugar originario de esas palabras… un rostro enrojado y suave me mira… que ojos tan dulces… que sonrisa tan afable… es una madre con su hijo pidiendo perdón por las acciones repetidas de su pequeño… el pequeñín estaba jugando con un camión y me atropelló el pie… niños… Tic…Tac…Tic…Tac…
Vuelvo a estar sólo… ya se han ido mis acompañantes de la sillas blancas e incomodas… sólo restamos yo y la puerta azul… las tripas parecen comenzar su propia revolución… la cabeza da vueltas al igual que las manecillas del reloj, que no han cesado de girar des de que llegué…
Tic…Tac…Tic…Tac… sigo sólo… palpando mi bolsillo encuentro una vieja lata de atún… hace tiempo que mi paladar no prueba ni un bocado de ese manjar… hace tiempo que me conservo a base de sucedáneos… hace tiempo que… oigo mi nombre por el altavoz… llegó mi hora… quien sabe… de momento entraré por la puerta azul a ver qué sucede…
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